Tomado de Muy interesante.http://www.muyinteresante.es/ipor-que-entra-sueno-despues-de-comer
viernes, 28 de septiembre de 2012
¿Por qué entra sueño después de comer?
Las “caídas del sistema” que sufrimos tras una opípara pitanza pueden ser responsabilidad directa de la glucosa, que hace descender en el hipotálamo los niveles de oxerina, una clase de proteínas cuya misión es mantenernos alerta. El pasado mes de junio, Denis Burdakov y su equipo de investigadores de la Universidad de Manchester, en Inglaterra, demostraron que incluso una subida casi imperceptible de glucosa disminuye sensiblemente la actividad neuronal. Por eso, si quiere seguir despierto deberá evitar las comidas ricas en carbohidratos o grasa; en cambio, mantendrá los ojos bien abiertos tras un banquete de proteínas. Hay, no obstante, voces discrepantes. Según Eduard Estivill, director de la Unidad de Alteraciones del Sueño del Instituto Dexeus de Barcelona, esta sensación de sueño simplemente responde a la necesidad de descansar tras ocho horas de vigilia.
Dormir con la televisión encendida puede causar depresión
Dormir con la luz o la televisión encendidas aumenta el riesgo de depresión, según revela un estudio de la Universidad Estatal de Ohio (EE UU) presentado en el último encuentro anual de la Sociedad Americana de Neurociencia en San Diego.
En sus experimentos, el investigador Rand Nelson y sus colegas trabajaron con 16 hamsters, de los cuales la mitad durmió en absoluta oscuridad mientras los demás eran expuestos cada noche a un nivel de luz equivalente al que produce el brillo de un televisor encendido en una habitación a oscuras (5 lux). Ocho semanas más tarde, los animales que nunca dormían a oscuras habían visto modificado su estado de ánimo, desarrollando depresión. Cuando los investigadores examinaron sus cerebros comprobaron que en la zona del hipocampo observaron que tenían una menor densidad de vellosidades (espinas dendríticas) en las neuronas que quienes dormían sin luz, lo que implica que la comunicación entre sus células nerviosas se habría visto reducida. Según Nelson, los resultados sugieren que el nivel de luz óptimo que necesita el cerebro de los mamíferos para descansar es sorprendentemente bajo.
Los investigadores asocian los efectos de la exposición a la luz a una hormona llamada melatonina, que se produce cuando el cuerpo detecta la oscuridad. Entre otras cosas, la melatonina regula el ritmo circadiano, nos ayuda a conciliar el sueño y actúa como antioxidante. Si hay demasiada luz ambiental, el cuerpo podría producir cantidades de melatonina inadecuadas.
Tomado de Muy interesante. http://www.muyinteresante.es/dormir-con-la-television-encendida-puede-causar-depresion
¿Qué lleva a un niño a suicidarse?. Análisis psicológico
Dos casos registrados esta semana, en el Tolima y en el Valle del Cauca, prendieron las alarmas sobre este fenómeno, que el año pasado cobró la vida de 193 menores de edad.
¿Qué tiene en la cabeza un niño de cinco años que se suicida (como lo registra el informe de Medicina Legal Forensis 2011)? El año pasado, 193 menores de edad entre los 5 y 17 años decidieron quitarse la vida. ¿Qué los llevó a tomar esa decisión?
Quizás una de las personas en Colombia que más conoce el tema es Miguel de Zubiría Samper, director de la Liga Colombiana contra el Suicidio Infantil y autor del libro Cómo prevenir la soledad, la depresión y el suicidio en niños y jóvenes. Zubiría dice que los cerca de diez años que ha investigado este fenómeno lo han llevado a una conclusión: existen dos razones fundamentales que llevan a una persona a tomar esta decisión.
“Detrás de los mil motivos que un niño tiene para suicidarse —desde perder una materia hasta la separación de sus padres o sentirse gordo— hemos encontrado dos causas muy precisas: la primera es la infelicidad en el sentido estricto de la palabra”.
Asegura que en Colombia hay un número “enorme” de niños y adolescentes que se sienten muy infelices porque no tienen buenos amigos, o porque su colegio les parece aburrido, o porque se sienten solos. Incluso, se atreve a calcular que un 50% de los jóvenes en nuestro país está llevando una vida infeliz.
“Si no hay fuentes de felicidad (así los papás piensen que la felicidad está en un televisor en el cuarto, en un ipod o en una camiseta nueva), cualquiera de los mil motivos que mencionamos pueden disparar ese pensamiento de que la única opción es suicidarse”, dice.
Y hay una segunda causa: el sufrimiento. “Existe un gran dolor sicológico al perder a tu mamá, a tu papá, al sentirte feo... hay mil fuentes posibles de sufrimiento. Y ese dolor es tan severo que el niño o el joven o el adulto —no hay ninguna diferencia— piensa que la única manera de eliminarlo es acabando con su vida”.
Según De Zubiría, la pregunta de fondo en estos casos es: “¿Por qué hay millones de niños tan infelices y por qué sufren tanto por cosas que a nosotros nos parecerían idioteces? Ese es el cuestionamiento que hay que resolver, y para eso hay que preguntarse también qué está pasando en las familias y en los colegios, que no estamos preparando a los niños para que aprendan a sufrir”.
Dos suicidios ocurridos esta semana en Mariquita, Tolima, y en Jamundí, Valle del Cauca, pusieron en evidencia un recrudecimiento de esta problemática.
El más reciente fue el de Brigit Lorena González, de 14 años. Un disparo al aire enfrente de sus compañeros de colegio fue la primera alerta. Luego, con el mismo revólver calibre 38 apuntó a algunos de ellos y, de inmediato, una crisis nerviosa empezó a contagiarlos. Una crisis que estalló cuando, después de fallidos intentos de diálogo con ella, Brigit apretó el gatillo una vez más. Su estómago recibió el impacto y su muerte fue inevitable.
El otro fue el domingo en horas de la tarde. Un menor de 12 años, en el sur del Valle del Cauca, decidió ahorcarse después de un regaño de su mamá.
Y tal vez, como lo explica Luis Alberto Ramírez, médico siquiatra de niños, unas de las principales causas son los altos de niveles de ansiedad en la infancia y su vulnerabilidad a un entorno social cada vez más complicado.
“Hay un promedio de 37% y 40% de niños y jóvenes con grados críticos de ansiedad. Eso es lo que están experimentando en una sociedad donde los lazos familiares se han debilitado y las relaciones giran en torno a un consumo desfasado”, dice. A ello se suman el miedo al fracaso y el temor hacia el futuro. En suma, una desesperanza agobiante.
Según este especialista, la incomprensión de los padres es otro factor que tiene graves consecuencias. “Lo peor que se puede hacer cuando un niño dice que se va a matar, es retarlo”. Para Ramírez, hay temporadas peligrosas, como el final de un año escolar, cuando, si no se cumplen las metas propuestas, es posible que haya momentos de crisis.
“Ahí lo mejor que se puede hacer es escuchar y presentarles momentos amables. Los padres deben entender que los niños tienen diferencias intelectuales y que no todos tienen la misma capacidad”, afirma.
Redacción Vivir | El Espectador. 19/09/12
La infelicidad y el sufrimiento son las principales razones que llevan a un niño a tomar la decisión de quitarse la vida. / 123 rf
¿Qué tiene en la cabeza un niño de cinco años que se suicida (como lo registra el informe de Medicina Legal Forensis 2011)? El año pasado, 193 menores de edad entre los 5 y 17 años decidieron quitarse la vida. ¿Qué los llevó a tomar esa decisión?
Quizás una de las personas en Colombia que más conoce el tema es Miguel de Zubiría Samper, director de la Liga Colombiana contra el Suicidio Infantil y autor del libro Cómo prevenir la soledad, la depresión y el suicidio en niños y jóvenes. Zubiría dice que los cerca de diez años que ha investigado este fenómeno lo han llevado a una conclusión: existen dos razones fundamentales que llevan a una persona a tomar esta decisión.
“Detrás de los mil motivos que un niño tiene para suicidarse —desde perder una materia hasta la separación de sus padres o sentirse gordo— hemos encontrado dos causas muy precisas: la primera es la infelicidad en el sentido estricto de la palabra”.
Asegura que en Colombia hay un número “enorme” de niños y adolescentes que se sienten muy infelices porque no tienen buenos amigos, o porque su colegio les parece aburrido, o porque se sienten solos. Incluso, se atreve a calcular que un 50% de los jóvenes en nuestro país está llevando una vida infeliz.
“Si no hay fuentes de felicidad (así los papás piensen que la felicidad está en un televisor en el cuarto, en un ipod o en una camiseta nueva), cualquiera de los mil motivos que mencionamos pueden disparar ese pensamiento de que la única opción es suicidarse”, dice.
Y hay una segunda causa: el sufrimiento. “Existe un gran dolor sicológico al perder a tu mamá, a tu papá, al sentirte feo... hay mil fuentes posibles de sufrimiento. Y ese dolor es tan severo que el niño o el joven o el adulto —no hay ninguna diferencia— piensa que la única manera de eliminarlo es acabando con su vida”.
Según De Zubiría, la pregunta de fondo en estos casos es: “¿Por qué hay millones de niños tan infelices y por qué sufren tanto por cosas que a nosotros nos parecerían idioteces? Ese es el cuestionamiento que hay que resolver, y para eso hay que preguntarse también qué está pasando en las familias y en los colegios, que no estamos preparando a los niños para que aprendan a sufrir”.
Dos suicidios ocurridos esta semana en Mariquita, Tolima, y en Jamundí, Valle del Cauca, pusieron en evidencia un recrudecimiento de esta problemática.
El más reciente fue el de Brigit Lorena González, de 14 años. Un disparo al aire enfrente de sus compañeros de colegio fue la primera alerta. Luego, con el mismo revólver calibre 38 apuntó a algunos de ellos y, de inmediato, una crisis nerviosa empezó a contagiarlos. Una crisis que estalló cuando, después de fallidos intentos de diálogo con ella, Brigit apretó el gatillo una vez más. Su estómago recibió el impacto y su muerte fue inevitable.
El otro fue el domingo en horas de la tarde. Un menor de 12 años, en el sur del Valle del Cauca, decidió ahorcarse después de un regaño de su mamá.
Y tal vez, como lo explica Luis Alberto Ramírez, médico siquiatra de niños, unas de las principales causas son los altos de niveles de ansiedad en la infancia y su vulnerabilidad a un entorno social cada vez más complicado.
“Hay un promedio de 37% y 40% de niños y jóvenes con grados críticos de ansiedad. Eso es lo que están experimentando en una sociedad donde los lazos familiares se han debilitado y las relaciones giran en torno a un consumo desfasado”, dice. A ello se suman el miedo al fracaso y el temor hacia el futuro. En suma, una desesperanza agobiante.
Según este especialista, la incomprensión de los padres es otro factor que tiene graves consecuencias. “Lo peor que se puede hacer cuando un niño dice que se va a matar, es retarlo”. Para Ramírez, hay temporadas peligrosas, como el final de un año escolar, cuando, si no se cumplen las metas propuestas, es posible que haya momentos de crisis.
“Ahí lo mejor que se puede hacer es escuchar y presentarles momentos amables. Los padres deben entender que los niños tienen diferencias intelectuales y que no todos tienen la misma capacidad”, afirma.
Redacción Vivir | El Espectador. 19/09/12
Tomado de: ELESPECTADOR.COM http://www.elespectador.com/impreso/vivir/articulo-376138-lleva-un-nino-suicidarse
El matoneo laboral, un fenómeno creciente en Colombia
"El acoso busca infundir miedo, terror intimidación y angustia... Causar perjuicio laboral"
Afecta sensiblemente el desempeño y la salud física y emocional de los empleados.
Venga de quien venga, es decir, de jefes, compañeros o subalternos en el trabajo, los comentarios despectivos, las amenazas personales, la humillación pública y las tácticas de intimidación hacia un empleado, forman parte de un creciente fenómeno: el acoso o matoneo laboral.
De acuerdo con la Asociación Colombiana de Psiquiatría, se estima que alrededor del 19 por ciento de los trabajadores del país (uno de cada cinco) estarían siendo víctima de presiones de este tipo. Desde el 2006, año en que se expidió la ley 1010 para contrarrestarlo, el Ministerio del Trabajo ha abierto 4.849 investigaciones por esta causa. En el primer semestre de este año se registraron 655, más de la mitad del 2011.
El médico psiquiatra Mario Danilo Parra, experto en el tema, explica que en la intimidación laboral cabe todo aquel maltrato lo suficientemente severo como para comprometer la estabilidad emocional y física de una persona y amenazar su tranquilidad.“Es una conducta abusiva, consciente, de una persona hacia otra, que genera incomodidad y hace que el trabajador se sienta avergonzado y agredido”, dice Parra.
Ese es el caso de María Juliana, de 36 años, empleada de una entidad pública. Asegura que no tuvo problemas dentro de la empresa durante el primer año de trabajo, porque su desempeño siempre ha sido impecable, “pero quedé en embarazo, y prácticamente desde entonces empecé a ser blanco de comentarios y tratos despectivos por parte de una funcionaria de la que dependo”, cuenta ella. María Juliana supo, por ejemplo, que a sus espaldas hacía comentarios descalificadores (“se empleó en esta empresa solo para embarazarse”), que se agravaron a medida que se acercaba el nacimiento de su hijo, con la consabida licencia de maternidad.
“Lo peor ha sido soportar el descrédito de mi trabajo ante mis compañeros; ha llegado a compararlo con el de una principiante. No acepta mis razones, a veces ni siquiera me recibe en su oficina para tratar cosas urgentes, y eso entorpece mi función. La desazón es terrible, hay días en que no quiero llegar a la oficina, pero no puedo renunciar”, cuenta ella, quien busca trabajo desesperadamente.
Aunque el matoneo no se da solo de directivos hacia empleados, es el más común, “cuando existe una línea jerárquica el agredido rara vez denuncia y soporta la situación, por temor a ser despedido”, señala Juan Vicente Conde, expresidente de la Sociedad Colombiana de Medicina del Trabajo.
Por el contrario, el matoneo que se da entre compañeros al mismo nivel suele esconder la intención de superar al otro jerárquica o salarialmente. “En ese propósito, se minimiza, ridiculiza y pone en evidencia al otro cuando comete un error o incurre en una falta, así sea menor”, afirma Parra.
No obstante, este especialista asegura que no hay matoneadores sin personas que se dejen matonear. “Unos y otros tienen rasgos de personalidad definidos –señala Parra–. El matoneado tiende a ser dependiente y requiere aprobación y validación permanentes; el matoneador tiene componentes narcisistas, que lo llevan a creer que es más importante que los demás. Cuando estas personalidades se encuentran, tienden a engancharse”.
Vale anotar que esto afecta la calidad del trabajo y la salud de los agredidos. Entre ellos son comunes las alteraciones del sueño, la ansiedad, la depresión, el desánimo y los dolores; algunos incluso llegan a obsesionarse tanto con su desempeño laboral, que pueden creer que se merecen ese mal trato, por no estar a la altura de los demás.
No es para menos. La humillación y la intimidación a veces no son directas; de hecho, pueden adornarse con palabras para que los insultos se parezcan más a un consejo maternal que a una agresión.“Aquí caben frases del estilo, ‘mira, ¿no has pensado en cambiar de trabajo? Te veo cansado, como desgastado... A todos nos pasa’; se trata de expresiones que, aunque parecen inocentes, en el caso del matoneo tienen la consciente intención de hacer daño”, puntualiza Conde.
Una ley ampara a las víctimas
Toda empresa debe crear comités para que los afectados denuncien Tal y como lo ordena la ley, toda empresa pública o privada del país está en la obligación de consolidar los comités de convivencia laboral, conformados por empleadores y representantes de los trabajadores elegidos por sus compañeros. Tras recibir las quejas de acoso, y como mediadores de primera instancia, estos deben adoptar medidas correctivas y preventivas.
Si el problema persiste, se puede acudir al Ministerio del Trabajo, a través de los inspectores laborales, en busca de una conciliación, o demandar ante el juez laboral (los empleados públicos deben acudir a la Procuraduría). Los trabajadores pueden poner sus quejas y denuncias en las 32 oficinas territoriales del Ministerio (hay una por cada departamento) y dos adicionales en Apartadó y Barrancabermeja.
En Twitter: @SaludET
REDACCIÓN SALUD. 25/09/12
Tomado de: El Tiempo.com http://www.eltiempo.com/vida-de-hoy/salud/el-matoneo-laboral-un-fenomeno-creciente-en-colombia-_12252565-4
Los Depresivos ven el mundo de color gris
La depresión tiene un efecto en la vista que hace que sea más difícil de detectar el contraste entre blanco y negro. Como consecuencia el mundo se percibe literalmente en tonos grises cuando nos sentimos deprimidos, según revela una investigación llevada a cabo por científicos de la Universidad de Friburgo, en Alemania.
En el estudio, Ludger Tebartz van Elst y su equipo midieron la respuesta de la retina de varias personas, tanto con depresión como sin ella, que fueron sometidas a análisis de neuropsiquiatría y oftalmología. La retina, ubicada en la parte posterior del ojo, contiene células sensibles que convierten la luz en impulsos nerviosos que el cerebro interpreta para permitirnos ver.
Los científicos descubrieron que los pacientes con depresión, algunos sometidos a tratamientos antidepresivos y otros no, tenían una capacidad mucho más baja de contraste en la retina que los que no sufrían el trastorno. El efecto, explican los autores, es similar a ver la televisión bajando los niveles de contraste. Y podría explicar por qué, a través del tiempo, los artistas de todas las culturas han representado la depresión usando los símbolos de la oscuridad o la uniformidad del gris.
Los investigadores también encontraron una asociación entre la capacidad de detectar el contraste y la severidad de la depresión. La gente con más depresión mostró menos capacidad de distinguir contrastes en la retina. Tal como señalan los investigadores en la revista Biological Psychiatry, el estudio podría conducir a crear una forma de evaluar objetivamente la gravedad de la depresión.
Tomado de: muy interesante. Elena Sanz 22/07/2010
http://www.muyinteresante.es/los-depresivos-ven-el-mundo-de-color-gris?utm_source=twitter&utm_medium=socialoomph&utm_campaign=muy-interesante-twitter7
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